Lo Efímero

(... fin de año ...)

Fin de año. La gente se estresa. ¿Por qué se estresan? Me alegra estar lejos de las grandes aglomeraciones de gente, de pelear por un pedazo de vereda, tengo todo el bosque a mi disposición. No tengo por qué salir a la calle y luchar como salvaje por un pedazo de calle siendo que hay tanto espacio libre en otros lugares. Se nota que me estoy acostumbrando paulatinamente a mi alejamiento de las grandes urbes, aceptado la realidad del "ahora".

Como llega fin de año, muchos sacan cuentas de todo tipo. El 2006 pasará a la historia de la humanidad y personal, como todos los años. Yo también saco mis resúmenes y cuentas de varios tipos, pero a menor escala.

En resumen, quiero dedicar éste post y éste año, que se va, porque se tiene que ir, a Lo Efímero.

Efímero se refiere a algo de corta duración, algo que comienza y termina rápido, de forma fugáz.

Nosotros, los humanos, sentimos cariño y ternura por aquellas cosas que no duran, que son efímeras, por eso amamos nuestra infancia y nuestras propias vidas porque precisamente sabemos que no durarán, también por eso celebramos la partida y la llegada de los "años nuevos y viejos", porque sabemos, que quizás antes que nosotros, se marcharán.

Quiero expresar mi amor, por todas aquellas cosas y seres efímeros que pusieron una sonrisa en mi rostro y llenaron mi alma, mi vientre, mi mente, mis ideas y todo mi ser de placeres, orgullos, alegrías, tristezas, espacios llenos y vacíos, odios, malestares, letras, etc.

Yo amo todo lo efímero. Y todo lo que me rodea es efímero. Que las cosas sean efímeras, no significan que sean insignificantes precisamente, sino que es más bien un arte. El arte de saborear, aunque sea una vez en la vida, un sabor que jamás logrará volver a repetirse de la misma forma, y que quizás, en su exclusiva condición de éfimero, permanezca por siempre en el paladar como un recuerdo a las papilas gustativas del deseo.